Conoce de la mano de Riki Minguez Gabiña, vicepresidente y vocal de los proyectos de África de medicusmundi Bizkaia, los proyectos que se llevan a cabo en Ruanda
El pasado 22 de agosto partí hacia Ruanda y en un viaje de dos semanas tuve la oportunidad de ver los proyectos que medicusmundi Bizkaia ha llevado a cabo en los últimos años.
Fue un viaje emocionante, las gentes y paisajes de Ruanda son especiales, y entre sus montañas nos daban recibimientos muy emotivos. En Ruanda llevamos más de 50 años realizando proyectos de cooperación, vivimos el genocidio de 1994 muy de cerca y nos sentimos comprometidos con la sociedad local.
Quiero agradecer especialmente a la cooperante afincada en Ruanda su actitud cercana y dinámica. Ana Martín Aransay organizó una agenda llena de visitas y reuniones que me permitió conocer la realidad de los proyectos y de la sociedad ruandesa.
También nos reunimos con las juntas directivas de las tres ONGDs con las que actualmente trabajamos en el viaje, tanto las presidencias como con las direcciones de las asociaciones Arde Kubaho, Coforwa y Ugama. En las tres instituciones nos insistían en que las acciones de los proyectos deben servir para cubrir las necesidades locales y no pueden depender de las prioridades de los países ricos. Que los proyectos deben ser integrales y que la burocracia no puede restar tanto tiempo al trabajo diario, también.
Y como hemos abierto un nuevo proyecto en el lado del lago Kivu también nos reunimos con el SPR (Synergie des Femmes pour la Paix et la Réconciliation des Peuples des Grands Lacs d ‘Afrique) en la frontera con la República del Congo, concretamente en la localidad de Gisenyi.
Es la segunda vez que he acudido, la primera fue en 2004 y afortunadamente tanto las mujeres como los hombres de Ruanda han avanzado mucho, se ha desarrollado su economía y se han hecho muchas infraestructuras. A pesar de que las carencias son muy notables respecto a nuestra sociedad, las necesidades actuales y las primeras son muy diferentes. Antes los proyectos de nutrición y atención primaria eran muy importantes y empezamos con proyectos de empoderamiento de las mujeres. Hoy en día se trabajan mucho más los derechos reproductivos y sexuales y se impulsan muchas líneas de trabajo transversales.
Cabe destacar que, en Ruanda, viven inevitablemente en la economía circular. Todo se arregla, todo se recupera, todo se reutiliza. Es un país muy sostenible desde el punto de vista económico y medioambiental. Sin embargo, es un ejemplo de injusticia climática: el cambio climático que se está produciendo por los estados ricos lo sufren en Ruanda. En el ecuador las sequías y las lluvias torrenciales son cada vez más frecuentes y en los últimos años hemos tenido que enviar ayuda humanitaria en más de una ocasión.
Nuestras socias locales de Ruanda tienen una actitud muy optimista y dinámica, trabajan con entusiasmo y tienen muchos proyectos y necesidades de futuro detectadas para trabajar. En las cooperativas visitadas nos transmitían su buena disposición y su compromiso de seguir trabajando juntos.
Por mi parte el viaje ha sido muy motivador. Desde Bizkaia los proyectos se ven como acciones y números, pero acudiendo a Ruanda se ve que hay personas en los proyectos, que son personas con sentimientos, ganas, necesidades y dificultades económicas como nosotros. Los proyectos realizados son espectaculares, los que están en marcha van por buen camino y la financiación solicitada es muy necesaria.
Existen proyectos de todo tipo y destacan las siguientes líneas de trabajo:
- Atención sanitaria básica
- Promoción socioeconómica
- Integración comunitaria
- Acción humanitaria
- Educación de las jóvenes
- Empoderamiento de las mujeres
- Nuevas masculinidades
He estado muy a gusto, hemos reforzado las relaciones con sus instituciones y entidades y tengo mucha confianza en que en un futuro próximo llevaremos a cabo proyectos extraordinarios de cooperación.
Quiero agradecer de todo corazón a la asociación medicusmundi Bizkaia la experiencia vivida.