Ruanda es un país de África Central que goza de un clima templado con pluviometría suficiente y cursos de agua que recorren sus valles. En ese entorno se encuentra el Distrito de Kamonyi, uno de los 30 distritos del país donde se desarrollan las intervenciones de medicusmundi araba y bizkaia en el ámbito del agua, la higiene y el saneamiento.
Desde 2006, el trabajo de medicusmundi bizkaia se ha centrado en aspectos hídricos, construyendo y rehabilitando fuentes de agua naturales y creando comités de gestión para mejorar el acceso de la comunidad al agua. Además, se han equipado algunos colegios con infraestructuras de almacenamiento de agua de lluvia así como con letrinas ecológicas, y se han creado también comités HAMS (Higiene y Saneamiento en el Medio Escolar).
En el año 2011, se incluyeron en el proyecto algunos retoques. Además de seguir apoyando al Distrito de Kamonyi acondicionando pequeñas fuentes de agua en 4 sectores, se comenzaron a realizar programas de sensibilización siguiendo el enfoque PHAST (Saneamiento mejorado gestionado por la comunidad).
La encuesta sobre agua, higiene y saneamiento en el Distrito de Kamonyi, realizada en 2011 por medicusmundi, mostró que alrededor del 64% de los hogares de Kamonyi están construidos con ladrillos de adobe, reduciéndose el número de casas que están cementadas a solo un 23%. Esta situación, además de la instalación de cocinas no mejoradas en la estancia principal de la casa (21,8%), podría exponer a la población del distrito a enfermedades respiratorias en un 24%.
La encuesta reveló, asimismo, que miles de hogares utilizan una fosa al descubierto como letrina. Se observan también otros comportamientos tales como convivir con animales o la falta de conciencia sobre la importancia de la gestión de los residuos, que tienen un impacto negativo en la salud y que afectan en mayor medida a mujeres, niños y niñas.
Asimismo, el 86,7% de los hogares no dispone de ducha, lo que incide de manera negativa en la capacidad de mantener una adecuada higiene corporal, así como en las infecciones asociadas a la falta de higiene, sobre todo para las mujeres y niñas durante la menstruación.
La encuesta demuestra, por otra parte, que la construcción por sí misma no es suficiente y que la sostenibilidad de las infraestructuras construidas constituye un obstáculo en el acceso y en el ejercicio del derecho humano al agua.
Ante esta situación, de acuerdo con las instituciones del Distrito de Kamonyi y en colaboración con COFORWA (Les Compagnons Fontainiers du Rwanda), medicusmundi ha pasado de apoyar la construcción de infraestructuras a un enfoque llamado “soft” y basado en la promoción a nivel comunitario de la higiene y el saneamiento en los sectores de Karama y Kayenzi con un enfoque participativo. Además, incorpora técnicas de cambio de comportamientos a través de la puesta en marcha de clubes de higiene con más de 20 actividades en torno al agua, al saneamiento, la higiene, la salud y la nutrición.
Estas intervenciones de medicusmundi y COFORWA, a través de todos estos enfoques, han dado lugar a cambios positivos que se pueden observar en la comunidad, sobre todo en las zonas de Karama y Kayenzi.
El impacto de las intervenciones ha sido explicado por diferentes personas implicadas en estas:
¿Cuál es el objetivo de las intervenciones de medicusmundi en partenariado con el Distrito de Kamonyi?
Xávera NYIRASAFARI, encargada del seguimiento y evaluación de los proyectos de COFORWA: «El objetivo es contribuir a la mejora de la salud y de la higiene en el Distrito de Kamonyi. Esto significa que las intervenciones contribuyen a la reducción de enfermedades, reforzando la posición de las mujeres y su capacidad de decisión a nivel de los hogares y de la comunidad.«
Jean Paul KINYANGO, movilizador social de COFORWA: «Las intervenciones responden a las necesidades expresadas por la misma población beneficiaria. Se moviliza a las personas beneficiarias para que se impliquen más en las actividades buscando soluciones a los problemas que han identificado.«
Algunas lecciones aprendidas…
J.P. KINYANGO: «Una de las cosas que hemos constatado, y que ha servido de lección para todos, es que todo cambio positivo es posible cuando las personas beneficiarias saben lo que quieren y se implican en la búsqueda de soluciones. Sirva como ejemplo, que en el año 2012, en el pueblo de Ngoma, el número de hogares que disponía de letrinas con un nivel de higiene aceptable ha pasado de 51 a 83, el de composteras ha pasado de 2 a 50 y la cantidad de hogares que tratan el agua para el consumo, ha aumentado de 26 a 67.«
Annonciata, responsable de higiene en el Distrito de Kamonyi: «Se ha dado un cambio porque las reuniones mantenidas y las sensibilizaciones realizadas en el marco del CEBHPP, han permitido a la población comprender la importancia de la higiene así como apropiarse de actividades de higiene y saneamiento. Esto garantiza la sostenibilidad de los comportamientos positivos aprendidos, incluso tras la ejecución del proyecto, porque la población ha comprendido la pertinencia de uno u otro comportamiento.»
¿Qué actividades relacionados con la promoción de la equidad de género se han desarrollado en estas intervenciones? ¿Y cuál es su impacto?
Marie MURERWA, responsable de género y de la promoción de la familia en el Distrito de Kamonyi: «Los talleres de reflexión sobre género e higiene que se han organizado de manera regular inciden en la promoción de la equidad entre hombres y mujeres, dado que hombres y mujeres conjugan esfuerzos para mejorar las condiciones de higiene de sus hogares. Asimismo, durante la ejecución del CEBHPP, las mujeres participan en los clubs de higiene, lo que aumenta su capacidad de iniciativa y de toma de decisiones.«
El caso de Appolinarie, mujer viuda perteneciente al comité del club ABATWARAMUCYO del pueblo Gikurubuye
Appolinarie: «Al principio fue el animador social de COFORWA quien nos animó a formar un club de higiene. Hoy por hoy, nuestro club ABATWARAMUCYO funciona bien y resulta útil. Mi familia ha recibido numerosas lecciones en el club. Hemos mejorado la higiene de nuestra casa y estamos orgullosos de ello. Mis hijos e hijas, incluso los más pequeños ponen más interés que antes en la higiene del hogar.»
El caso de Jean MINAMI, miembro del club IWACUHEZA del pueblo Ngoma
Jean: «En el club de higiene aprendemos que tanto hombres como mujeres tenemos un rol que desempeñar en las tareas del hogar. En mi caso, me centro en la construcción de la letrina, la compostera, la balda para la vajilla así como el desbroce de los alrededores de la casa.»
¿Qué impacto tienen las intervenciones en la salud y el medioambiente?
Philémon, encargado de la higiene y el medioambiente en el hospital de Remera-Rukoma y miembro del comité de higiene del Distrito: «En las formaciones sanitarias se verifican las cartillas de pertenencia al club de higiene de los miembros. Esto permite saber cuáles son las enfermedades persistentes y orientar el trabajo del club. Gracias a ello, se ha logrado una reducción de enfermedades de origen hídrico y de transmisión oral-fecal, que afectaban en gran medida a la población infantil. Las enfermedades de la piel están desapareciendo y las sensibilizaciones realizadas tienen un impacto positivo en la tasa de vacunación infantil.»
Las intervenciones de medicusmundi y COFORWA en el Distrito de Kamonyi han tenido un impacto positivo, pero aún queda mucho camino por recorrer en todos los clubs, ya que todos no funcionan de la misma manera y con la misma efectividad.